martes, 29 de enero de 2013

Mujica anuncia en Chile, el derrumbe del comunismo que él mismo profesa

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Richard Grasso, director de la Bolsa de Valores de Nueva York, visita en la selva colombiana
a G. Reyes, "comandante" de las FARC marxista-lenininistas.  



El ex convicto presidente del Uruguay acaba de proclamar que el comunismo desaparecerá en América. Así se desprende claramente de su discurso, en que festejó la ausencia de Estados Unidos en el cónclave que bajo la batuta de Raúl Castro intenta resucitar la OLAS y otras asociaciones para delinquir de un sangriento pasado.  

Tiene razón Mujica:  el comunismo morirá sin la asistencia paternal y patrocinante de los circuitos plutocráticos enquistados en Estados Unidos que crearon el comunismo, lo financiaron con el dinero robado a los contribuyentes yanquis, lo sacaron del CTI en 1943, le obsequiaron los secretos nucleares que le permitirán arrasar ciudades norteamericanas, le concedieron la jefatura de las “fuerzas de paz” de la ONU, lo prestigiaron injustificadamente haciéndole sucesivas “guerras para no ganar” enviando deliberadamente a la muerte a la flor de la juventud estadounidense y trajeron y mantienen en Iberoamérica el carcinoma castrista, cuya génesis documentó fehacientemente el embajador norteamericano en La Habana Earl Smith en una obra de fácil acceso en internet para quienes no deseen vivir de ficciones (“El Cuarto Piso”).

A esa plutocracia apátrida y a sus operadores locales --a Graiver, banquero de los Montoneros, a Feldman, a los tiernos hermanos Schoklender, a asalariados de la City de Londres como Carlos Quijano, a latifundistas / sucursaleros de ATT como Seregni, a Richard Grasso, mecenas de la narcoguerrilla de las FARC -- a personajes como esos, y no a imaginarias reivindicaciones obreras, tienen que “agradecerles” nuestros pueblos las convulsiones y crímenes sembrados por el bolchevismo en suelo americano. 

Atribuyendo una incurable ignorancia a un pueblo al que desprecia, Mujica, agente de una ideología internacionalista, intentó posar en Chile de “nacionalista”. Quizá es la parte más repugnante de este afrentoso episodio, para una Hispanoamérica que supo engendrar nacionalistas genuinos, como Rubén Darío que reivindicó a una América “que aun reza a Jesucristo, que aún habla en español”, como Rodó, como José Vasconcelos, Felipe Ferreiro, Virgilio Filippo, José Ignacio Rucci, Jordán Genta…

Pero examinemos objetivamente la naturaleza de ese Comunismo. Será nuestro humilde aporte a la urgente obra de Erradicación del Analfabetismo Político de las clases dirigentes de nuestro país, que reclamamos como Objetivo de Desarrollo del Milenio.


(Polémica entre un Nacionalista y un ciudadano educado por la TV)


¿QUÉ ES EL COMUNISMO?
Es el sistema inventado por los apátridas Marx y Engels para dominar el mundo.

PERO SEGÚN M&E, EL COMUNISMO ES UN “SOCIALISMO CIENTÍFICO”: NO UN PLAN REVOLUCIONARIO, SINO EL ENUNCIADO OBJETIVO DE LEYES SOCIOLÓGICAS
RÉPLICA:
Por definición, el saber científico es coherente y no contradictorio.  Por definición dada por sus autores, la teoría comunista es la contradicción permanente.  Luego, no es una ciencia.
Pero además, Marx confiesa abiertamente: “No se trata de explicar el mundo, sino de cambiarlo. Como es obvio, el objeto de una Ciencia –como lo es la Sociología-- es describir la realidad tal cual es; cambiarla es el oficio del político, el moralista o el revolucionario, que no es honesto si define su programa como un proceso que se cumplirá inexorablemente, como se cumplen las leyes naturales. 
Marx incluso advirtió a sus secuaces: “Yo no soy marxista” (es decir: bienvenido el que invente algo más eficaz que yo para demoler la Civilización). Ningún científico fabrica “leyes” sin importarle que no reflejen el orden de la Naturaleza, ni se jacta de que esas “leyes” respondan a su conveniencia, en lugar de ser el espejo de la realidad.
También es revelador que el marxismo insista en la necesidad de crear un “Hombre Nuevo”.  Con seres “vulgares” como los que hoy habitan el planeta, las “leyes” marxistas no se cumplen.

¿CÓMO SERÍA ESE HOMBRE NUEVO?
1)         Como para el marxismo todo lo que existe, incluido el ser humano, es materia, su Hombre Nuevo es un ser carente de espiritualidad, de razón y hasta privado del disfrute de bienes económicos.  De ello surge que el “hombre viejo”, dotado de espíritu, inteligencia, propiedad, debe ser liberado de esos “inconvenientes”. El comunismo quiere convertirnos en algo peor que bestias: en cosas.
2)         El Hombre Nuevo no existe en cuanto individuo: su única dimensión “real” (marxista) es la del rebaño, por lo cual –“científicamente” hablando-- carece de derechos individuales.
3)         No es libre ni responsable.  No es superior a una piedra librada a su peso en el vacío, que simplemente cae, sin que a nadie se le ocurra que ella, la piedra, “opta” por caer o no caer, o que puede elegir libremente su trayectoria, en lugar de precipitarse directamente a tierra.
3) Y por no ser libre, el Hombre Nuevo no se rige por normas morales (ni por supuesto puede exigir a los demás “hombres nuevos” que lo traten moralmente).
4)  La ausencia de límites internos (espiritualidad, moralidad) sólo puede subsanarse mediante la fuerza bruta. Todo Estado comunista es necesariamente tiránico.
TODO ESTO ME PARECE UNA GROSERA SIMPLIFICACIÓN DEL PENSAMIENTO DE MARX Y ENGELS
Simplemente lea los escritos de ambos personajes.

PERO ESE “HOMBRE NUEVO” ES IMAGINARIO.  NO EXISTE NI ES POSIBLE CREARLO.  POR LO TANTO EL MARXISMO ES UN INOFENSIVO DESATINO, UNA UTOPÍA SIN CONSECUENCIAS, UNA CURIOSIDAD LITERARIA...
...que según confesión explícita de sus autores ha costado a la Humanidad cien millones de cadáveres.
Por supuesto que el hombre real ni siquiera por la violencia puede ser transformado en ese “hombre nuevo”, pero es posible matarlo en el intento.  Los siguientes son casos concretos en que se ha tratado de llevar la práctica esa “curiosidad literaria”:
§  Bajo la dirección de Nikita Salomón Jrushov Pearlmutter, el comunismo soviético “colectivizó” (confiscó)  la propiedad rural en Ucrania en los años treinta.[i] Para ello bloqueó con tropas el acceso a los graneros y mató de hambre a los kulaks (campesinos) que se negaban a entregar sus tierras.  Este genocidio (10 millones de seres humanos; quizá más) se reflejó en los censos oficiales de la URSS.
§  En 1975, el Khmer Rouge (partido comunista de Camboya) decidió crear una “economía agraria”. Para ello hizo evacuar a punta de bayoneta todas las ciudades del país, dejando a la intemperie sin alimentos a hombres, mujeres y niños (hasta los enfermos de los hospitales); aplanó los cementerios para suprimir los lazos espirituales de familia, y hasta prohibió el uso de lápices, declarándolos “instrumentos de comunicación de las clases dominantes”.  Un millón de victimas.
§  En China, la “Gran Revolución Cultural Proletaria” se empeñó en eliminar violentamente todas las tradiciones nacionales y populares. Durante una década (1966-1976) mantuvo al país en estado de coma, destruyendo las obras intelectuales y artísticas de un pasado milenario.
§  Otro maoísta, el dictador comunista de Albania, Enver Hodja, decretó el cambio obligatorio de nombre de toda la población, para suprimir los nombres cristianos.  Y en Rumania, la ultracorrupta dictadura comunista de Ceausescu y Sra. mandó demoler 40.000 aldeas, para “industrializar el país” suprimiendo las tradiciones populares.
§  En España, bajo la dominacion roja (1936-39), miles de niños fueron arrancados a sus familias y enviados a Rusia para “reeducarlos”.  Para agilizar la creación del “Hombre Nuevo”, el régimen, dirigido por el embajador soviético en Madrid, Rosenberg, asesinó a 11 obispos y 10.000 sacerdotes y monjas (“Hemos resuelto el problema religioso en España no dejando en pie ni un solo templo”, proclamó el líder comunista Negrín).  Entre miles de víctimas civiles, fueron fusiladas las dos hijas adolescentes del Vicecónsul uruguayo en Madrid [ii] por dar alimentos a unas religiosas que escapaban del terror comunista.[iii]
§  En 1939, cumpliendo la “ley científica” marxista de que el hombre sólo piensa y obra según sus intereses de su clase, los soviéticos asesinaron en Katyn a 14.000 oficiales del Ejército Polaco por considerarlos --“científicamente” irrecuperables.  El crimen fue documentado por una comisión de países neutrales presidida por la Cruz Roja. 
§  Vista la ineficacia de los campos de concentración para convertir al comunismo a los internados, los soviéticos inventaron un instrumento más eficaz: los “sanatorios” psiquiátricos, en que mediante drogas psicotrópicas se desintegraba mentalmente a los disidentes. Esa “terapia” fue confesada por los líderes soviéticos en el XX Congreso del P.C. de la URSS, cuando por oportunismo tomaron distancia de su ex-amado líder José David Djugashvili (a) Stalin (a quien querían presentar como extremista).
§  Y en cuanto a la supresión de la individualidad, la moral y la vida privada, conforme al magisterio de Lenin (“La moral no existe: es un subproducto de la lucha de clases. Es moral lo que sirve la causa del proletariado”), valgan unos pocos ejemplos:
-- La dictadura comunista de Bela Kuhn, en Hungría (1918) decretó la colectivización de los cuartos de baño de los domicilios privados!   Otro monstruo, Szamuelly, jefe de policía del mismo régimen, se regodeaba: “A los detenidos no les pregunto si han atentado contra el poder soviético– Lo que les pregunto es la profesión de su padre y de su madre: a qué clase social pertenecen”.
-- En los años setenta, la justicia uruguaya comprobó que en el Departamento de Treinta y Tres la subversión reclutaba adeptos mediante un estudiado plan de libertinaje sexual.
-- El “profeta menor” del comunismo, Federico Engels, escribió Orígenes de la Familia, la Propiedad Privada y el Estado, uno de los libros más repugnantes que ha producido la mente humana [iv], para denigrar con fétidas teorías “científicas” esas tres instituciones clave para una vida civilizada.  
-- En 1999 una diputada comunista italiana exigió la derogación de la prima por hogar constituido que se paga a los trabajadores, calificándola de “instigación al matrimonio”.
-- En estos mismos días, el Partido del Aborto (también conocido como Encuentro Progresista/Frente Amplio) libra una encarnizada batalla para legalizar el asesinato de niños, directamente y a través de técnicas eugenésicas de “reproducción asistida”.  Los que sobrevivan serán los “hombres nuevos” del Uruguay marxista.                                                                                             

SEGURAMENTE ESOS EJEMPLOS SON FALSOS O EXAGERADOS
RÉPLICA:  No se deje ganar por el ocio: documéntese y después discuta. Todo el material que aportamos viene de fuentes asequibles y públicas.

PERO EL COMUNISMO NO ES EL ÚNICO SISTEMA QUE HA COMETIDO EXCESOS
RÉPLICA:  El comunismo no ha cometido excesos.  Sus crímenes son la fiel expresión de su ideología. Trata al hombre tal como lo describe.

PERO ¿QUÉ DICE EL COMUNISMO DE SÍ MISMO?  HAY QUE ESCUCHAR LAS DOS CAMPANAS
Muy justo; a los Nacionalistas rara vez nos reconocen ese derecho.  Las siguientes son las principales ideas comunistas, sin quitar ni agregar una coma:
(1) DIALÉCTICA
El comunismo no admite nada permanente.  Todo lo que existe merece perecer”; “la putrefacción es el laboratorio de la vida” son dos conocidas enseñanzas de Lenin. 
Para cubrir todos los flancos, el comunismo –igual que el liberalismo—sostiene que la realidad, si existiera, no interesa: “No se trata de conocer la realidad, sino de cambiarla”, es el estandarte de Marx.
A pesar de su vesanía, este rechazo de todo principio estable es lo que da al comunismo su potencial revolucionario.  El comunismo puede --sin dejar de ser comunismo, es decir sin abandonar su programa—adoptar en cada momento la postura que más le conviene, forjar las alianzas más insólitas (para lo cual no lo detiene ninguna barrera moral) [v]. 
Ejemplos:
-- El amor a la Patria, para los comunistas, es una despreciable “alienación”.[vi]  Pero viendo a la poblacion soviética poco entusiasta en morir por el materialismo dialéctico y los koljozes, Stalin proclamó la lucha contra Alemania (1941-45) como “Gran Guerra Patria”[vii], abrió al culto las iglesias antes convertidas en establos o museos antirreligiosos, disolvió la “Sociedad de los Sin-Dios” y desempolvó las banderas de la Santa Rusia de los zares.  (Obviamente, el fin de la guerra dio paso a una nueva persecución religiosa).
-- El comunismo se proclama democrático y por lo tanto rechaza todas las dictaduras y cuartelazos. Pero su flexibilidad dialéctica le ha permitido, sin abandonar sus fines revolucionarios, apoyar:
·                     Al Sargento Batista (en cuyo gabinete tuvo ministros),
·                     Al Generalísimo Rafael Leonidas Trujillo.
·                     Al Mariscal Pétain hasta 1941 (la “resistencia” de los maquis recién comenzó cuando la URSS fue invadida por Alemania).
·                     A Chiang kai-shek (“héroe de la independencia” contra Japón; “tirano corrupto” contra Mao).
·                     Al sha Reza Pahlevi de Irán.
·                     Al “golpista” Chávez de Venezuela.
·                     Al “golpista” Velazco Alvarado, de Perú, cliente favorito de las fábricas de armas soviéticas.
·                     A la “dictadura de los coroneles” en Grecia.
·                     En el Uruguay:
·                     En 1942 a la “dictadura buena” del Gral. Baldomir, aliado de la legendaria senadora comunista Julia Arévalo.
·                     Desde 1971, al General Seregni, conocido represor de sindicalistas bancarios y agitadores de la FEUU.
·                     En febrero de 1973, al movimiento cívico-militar uruguayo, al que recién empezó a “combatir” en junio, visto que no podía manejarlo. 
·                     Fiel a su “anticolonialismo” apoyó la reconquista de las Malvinas, hasta que le pareció más redituable la derrota argentina y la destrucción de sus fuerzas armadas, pues como enseñaba Lenin –que pactó con el militarismo prusiano en 1917[viii]— el ideal del comunista es que “su” país sea vencido militarmente, pues el caos de la derrota crea condiciones prerrevolucionarias. 
-- El comunismo es enemigo del “imperialismo yanki”.  Pero Marx y Engels, en artículos firmados publicados en la prensa europea, alentaron al ejército norteamericano a conquistar México y avanzar por la costa del Pacífico.[ix]
-- Y la religión es “el opio del pueblo”... en tanto y cuanto no convenga proclamar a Cristo “el primer comunista”. 
(2) MATERIALISMO
El comunismo admite como única realidad: la materia. (Naturalmente, esto contradice la negación dialéctica de toda realidad: tampoco debería admitir la realidad de la materia. (Por esta incongruencia, quejarse al Comité de Base o al CCZ más próximo)
En el pensamiento de Marx, la materia, por su unicidad, eternidad y por ser generadora de cuanto existe, asume  el carácter de divinidad.  El marxismo es -sin ironía de nuestra parte- una religión no confesa.  [x]
El dios-materia engendra todo lo existente sacándolo de sí (no de la nada, por acto creador, lo que creeremos o no según la fe, pero que no es ilógico), sin perder lo que da. Asombrosa docilidad mental de los adeptos a esta ideología, que por lo visto creen que al pagar una deuda de $100 conservan los $100.
(3) EVOLUCIONISMO
Como un buen marxista tiene que admitir que el hombre –por ejemplo Marx—aun siendo materia, algo tendrá de superior a, digamos, un adoquín o una cucaracha, el marxismo pide auxilio al evolucionismo darwiniano: la materia, por evolución, alcanza formas superiores.  Menos sinceros que Darwin, los marxistas no aclaran que la evolución no es una teoría científica.  La evolución explica que si le dan “todo el tiempo del mundo”, una amiba puede transformarse en Pavarotti, Napoleón, Shakespeare o Miss Universo. (Lo notable es que está probado que “todo el tiempo del mundo” no alcanzaría para hacer surgir por evolución el más sencillo órgano de un insecto, pero como vimos, “no se trata de explicar el mundo, sino de cambiarlo”).
(4) PROGRESISMO
Otro de los dogmas de la fe marxista.  La evolución tiene que ser progresiva, o la teoría se desploma.  Porque si de transformaciones se trata, es más verosímil la regresión que el avance. En lo social y moral sobran ejemplos: observando el estado de la sociedad del  Primer Mundo, es más fácil creer que el hombre se está transformando en cerdo que el cerdo en hombre.  Y en el plano científico, Castellani observa que la Medicina, por ejemplo sólo ha logrado sustituir las enfermedades contagiosas (y escribía antes del SIDA) por las degenerativas, con saldo cero.[xi] [xii]
(5) HUMANISMO
El marxismo es un humanismo al mismo título que el liberalismo, es decir la exaltación de un hombre definido según falsas premisas.  Es el humanismo de un “hombre” al que ha sido amputada la fe, la razón y hasta el disfrute de los bienes económicos.  Lo poco que sobra, es el “humanismo” marxista.
Este tipo de engaños son habituales en el marxismo, que por ejemplo:
·                     Se proclama “pacifista” porque define la paz como ausencia de resistencia al comunismo;
·                     Proclama la supresión del Estado, pero refiriéndose al Estado burgués. Llegado al poder, lleva al Estado a su máxima potencia.
·                     Es “anti-imperialista” contra los imperios que estorben sus planes en lugar de financiarlos.
·                     Proclama la “dictadura del proletariado”, pero a los proletarios más les vale no intentar ejercer el poder: de eso se encarga su “vanguardia”: el Partido Comunista.
·                     Es “progresista” en el entendido de que el progreso es el avance hacia el régimen sovietico.
·                     Rechaza el terrorismo... individual (Lenin).  El terror en masa se llama ingeniería social.
El hombre común, que no admite este tipo de embustes en sus relaciones de vecindad, comercio o familia –y a veces golpea al que pretende “venderle obeliscos”--, en el plano ideológico sucumbe a una descarada propaganda que describe estas mentiras con el altisonante título de “dialéctica”, y con su dinero (IVA, impuesto a los sueldos...) paga sin chistar a los profesores que embotan la mente de sus hijos con semejantes sandeces.

(6) COLECTIVISMO
El hombre –según Marx— no existe fuera de la clase social de la que proviene, la cual determina obligatoriamente su pensamiento y su conducta. 
La dialéctica –nombre distinguido de la incoherencia-- es un complemento indispensable de la teoría de las clases, ya que ninguno de los creadores y financistas del comunismo han pertenecido a la “clase obrera”, como manda su ideología.
Ejemplos:
·                     Engels amasó una fortuna explotando a los trabajadores de sus hilanderías, apropiándose de la “plusvalía” para financiar la obra de su socio Marx, que nunca trabajó y conocía las penurias de los obreros por referencia
·                      Léon Blum (alias Karfukelstein), Indalecio Prieto y Salvador Allende Gossens, líderes de los frentes populares de Francia, España y Chile, respectivamente, figuraban entre los hombres más ricos de sus países.
·                     Cyrus Eaton y Armand Hammer, multimillonarios comunistas “yankis”, el primero amigo personal de Lenin.
·                     Graiver, banquero privado de la guerrilla marxista argentina de los años 70. 
·                     Jacobo Schiff, Presidente de la banca Kuhn, Loeb & Co.:  financió la Revolución Soviética de 1918. En 1928 se jactó de su hazaña en el homenaje que se le tributó en Nueva York al cumplirse el 10° aniversario de esa revolución de los “trabajadores”. 
·                     Trotzky (alias Bronstein): Como en las dinastías más linajudas, el flujo de dólares para la revolución “rusa” comenzó cuando este “genial creador del Ejército Rojo” y asesino en masa de obreros y campesinos se casó con la hija del banquero Jivotovsky, sellándose con esa “boda real” la suerte del pobre pueblo ruso.
·                     Toda esta realidad la condensó graciosamente un comunista arrepentido, Whittaker Chambers: “En EE.UU., los obreros son socialistas, la clase media es fascista, y los millonarios son comunistas”.[xiii]
(7) DETERMINISMO
Es consecuencia del materialismo. El hombre no es libre. Por lo tanto el Estado reprime una conducta no porque sea “buena” o “mala”, sino porque es “antisocial”.[xiv]
(8) CLASES SOCIALES.  LUCHA DE CLASES
La división de la humanidad en clases –inventa Marx-- comienza cuando algunos individuos se “apropian” de parte del resultado económico de la producción (“plusvalía”), en lugar de darlo enteramente a quienes han puesto su trabajo manual en producirlo. Ese robo enriquece a quienes lo perpetran, y sume en una creciente miseria a las victimas.
Esta teoría se basa en la falsa premisa de que el valor de un bien se mide, sin faltar ni sobrar un centavo, por la cantidad de trabajo puesto en su producción, y que todo trabajo humano es trabajo humano igual. 
El comunismo niega así otros aportes al valor de un producto: el del inventor (que puede representar casi todo el valor del producto), el espíritu de empresa del fabricante, la pericia del obrero, el talento del profesional,  la sabiduría del buen gobernante, y hasta el orden legal general y la eficacia de la defensa nacional para que la producción pueda realizarse. [xv]  La teoría marxista del valor sería imbécil si no fuera un astuto señuelo para convencer a los trabajadores de que, se les pague poco o mucho, están siendo despojados y su único camino es rebelarse bajo la guía del P.C.
(9) REVOLUCIÓN
·         Si la economía capitalista se basa en el robo, como “científicamente” “demuestra” Marx plagiando a David Ricardo y a Rousseau;
·         Si ese robo lleva al trabajador a una situación en que “no tiene nada que perder más que sus cadenas”;
·         Si esa situación se puede rectificar sin mayor esfuerzo para las víctimas, porque los explotadores son cada vez más ricos pero menos numerosos, y los trabajadores cada vez más pobres pero más numerosos;
·         Y si la revolución llevará a una “sociedad sin explotados ni explotadores”, una jauja que dará “a cada cual según su necesidad” y sólo le exigirá “según su capacidad”, sin Estado ni gendarmes ni cárceles, porque el Hombre Nuevo no precisará delinquir ni habrá por qué reprimirlo, según el paraíso prometido por Marx...
...Basta lograr, como dice Marx en lenguaje esotérico semejante al argot del hampa, que el proletariado deje de ser una “clase en sí” y se transforme en una “clase para sí”, es decir que se haga conciente de que le conviene alzarse en armas contra los “capitalistas” y sus agentes (Policía, jueces, Fuerzas Armadas, según Lenin).  Esta labor de exasperación y engaño la cumple el P.C., “vanguardia del proletariado” (en la que los proletarios brillan por su ausencia).
La credulidad humana, la desesperación que el liberalismo provoca ex profeso en las masas expoliadas, y una millonaria propaganda (que los “proletarios”, justamente porque son proletarios, no pueden financiar) lleva a aceptar tantas mentiras, hacen que el marxismo, aunque doctrinariamente despreciable, sea un programa revolucionario eficaz.  ES AHÍ, EN EL PLANO DE LA SUBVERSIÓN, QUE EL MARXISMO NO COMETE “ERRORES”, NO SOSTIENE ABSURDOS NI ES UTÓPICO. 
PENSÁNDOLO BIEN, EL MARXISMO ES, SÍ, UNA “CIENCIA”: LA CIENCIA DE LA INSURRECCIÓN.
La dialéctica, el materialismo, el evolucionismo, la supresión del Estado, la sociedad sin clases y demás piezas del repertorio marxista, cumplen una mera función INSTRUMENTAL de esa única razón de ser de la ideologia comunista:  lanzar a los trabajadores a la revolución contra su propio pueblo; hacerlos forjar las cadenas de su propia esclavitud.  “Marx no buscó el bienestar de la clase obrera. Buscando la revolución, encontró al proletariado”, admite el marxista Rosenberg.[xvi]
Esto tiene un corolario importante: el comunismo no sólo no procura mejorar la situación de los trabajadores, sino que combate todo intento de corregir constructivamente las injusticias sociales. La armonía social y la difusión de la propiedad privada en todas las clases sociales no es negocio.  Un caso elocuente es “Antidühring”, la obra que Engels escribió para combatir al economista y filósofo socialista Eugenio Carlos Dühring, que al promover la elevación económica y cultural del pueblo retrasaba el proceso de miserabilización y desempleo que es el caldo de cultivo de la revolución comunista.[xvii]
Esta labor antinacional y antipopular que realiza el comunismo es la explicación de ese aparente misterio: que los usureros internacionales, tan diestros en amasar fortunas, financien “tontamente” a quienes les anuncian abiertamente que los van a privar de sus caudales y hasta de la vida. EL COMUNISMO ES LA EXPROPIACIÓN DEL CAPITAL, PERO DEL CAPITAL NACIONAL, EN BENEFICIO DE LA USURA GLOBALIZADORA. ¡La realidad de nuestro país lo demuestra palpablemente! Por eso Oswald Spengler afirma que “no hay un solo movimiento socialista que no haya estado al servicio del capitalismo”.[xviii]
(10) “ALIENACIONES”
Para crear ese “ejército proletario” que acabará con la “explotacion capitalista”, el partido comunista tiene que suprimir las defensas espirituales e intelectuales que impiden al hombre normal embanderarse con la subversión. 
La “solución” de Marx es otro de sus “descubrimientos sociológicos”. Marx “descubre” ciertos factores que distraen al trabajador de sus “verdaderos” intereses (la lucha de clases). Los denomina alienaciones porque “alienan”, es decir apartan, separan, al explotado de lo que le conviene (llevar al poder al comunismo).
La madre de todas las alienaciones es la religión, a la que Marx dedica sus más virulentas diatribas. La religión es el “opio del pueblo”. Engaña al obrero con la ilusión de un paraíso inventado por los curas, agentes de los explotadores capitalistas, y retrasa el estallido de la revolución.  El individuo embaucado por los sacerdotes atribuye a un Dios imaginario las cualidades que él –el hombre- sí posee.
De la “alienación” religiosa derivan “alienaciones” secundarias, como la filosófica y la política. Filosofar es perder el tiempo. Marx desprecia sardónicamente esa disciplina que lleva a sus más altas cumbres a la mente humana, y por eso titula “Miseria de la Filosofía” el libro en que combate a Proudhon, (que en “Filosofía de la Miseria” se ocupaba de estudiar la situación de las clases populares para aliviar sus penurias). En cuanto a la Política, arte y ciencia del amor a la Patria, es otra actividad ridícula, puesto que la bandera (la Patria) no es más que un trapo que se agita para despertar las pasiones de los inconcientes, según enseña el marxista argentino Juan Justo [xix]   El único interés auténtico del proletario es el económico. “La panza es reina y el dinero es dios”, diría Discépolo.

EL COMUNISMO TAL VEZ SEA MALO, PERO NO TIENE PESO ELECTORAL.  LOS URUGUAYOS NO SON NI SERÁN COMUNISTAS
Tampoco lo eran los rusos en 1917 ni los alemanes en 1918 ni los polacos en 1939 ni los españoles en 1936 ni los cubanos en 1958, ni...
ADEMÁS EL COMUNISMO TIENE MUCHAS IDEAS PARECIDAS A LAS LIBERALES
Es evidente que la asombrosa colección de idioteces que es la ideología comunista sólo ha podido prosperar porque el liberalismo le ha abierto el camino.
ESO ES INSULTAR AL ADVERSARIO
En todo caso, sería un insulto auto-infligido.  Según Lenin, “la democracia liberal es el acceso más próximo a la dictadura del proletariado”.  Según Marx, “el comunismo procede dialécticamente del capitalismo”.
TODAS las semillas del comunismo están en el liberalismo, que demuele la sociedad:
§  Negando la existencia de la verdad, o el interés humano en conocerla y servirla.
§  Promoviendo una enseñanza atea, alias laica.
§  La propiedad privada como raíz de los males sociales (absoluta coincidencia Marx-Rousseau).
§  La familia esclaviza (absoluta coincidencia Engels-Rousseau).
§  La Patria es un accidente.  Nadie tiene deberes para con su nación.
§  El gobierno mundial garantizará la paz y la prosperidad.
§  La moral no existe. Es bueno lo que me causa placer.
§  El Estado es el instrumento de la clase dominante.
§  El hombre tiene derechos, pero no deberes.
§  El nacionalismo es un exclusivismo egoísta, peligroso para la paz.
§  Fuerzas Armadas “civilistas” y profesionalistas, sin formación política (sin razones para combatir).
§  Pluralismo para todos y para todo. Sólo los promotores del pluralismo ajeno tienen derecho a defender su identidad propia.
Un sistema liberal hace realidad el sueño de León Trotzky, que aconseja dar el asalto al poder cuando la sociedad esté adecuadamente descompuesta.  Entonces –enseña el “genial estratego”—“todo será tan fácil como dar un puñetazo a un paralítico”.
Si a este magnifico obsequio ideológico se agregan las no menos espléndidas y concretas transferencias bancarias que han recibido de la usura liberal todos los sistemas marxistas, podemos deducir sin dificultad a qué se debe el nacimiento, la persistencia y la supervivencia de una ideología que ofende la inteligencia humana.

PERO EN RESUMEN, LOS PARTIDOS COMUNISTAS NO SON AGRUPACIONES CÍVICAS, SINO MOVIMIENTOS REVOLUCIONARIOS, YA QUE SU PROGRAMA ES ABSOLUTAMENTE CONTRARIO A LOS INTERESES DEL PAÍS Y SU POBLACIÓN, Y LO QUE ES PEOR, ENVUELVEN EN AMBIGÜEDADES SU VERDADERO CONTENIDO, LOGRANDO ALIADOS MOMENTÁNEOS QUE OPORTUNAMENTE TAMBIÉN SERÁN VÍCTIMAS DEL COMUNISMO
Llegas tarde.  Ya los chinos inventaron la pólvora.
PERO EL COMUNISMO CAYÓ.  NO ES MÁS QUE UNA PÁGINA TRISTE DE LA HISTORIA.
RÉPLICA:  El comunismo no cayó: convergió transitoriamente con el liberalismo cuando atisbó una reacción interna, más o menos miope, pero reacción, en Occidente, que amenazaba privarlo de armas, tecnología y ayuda económica, sin los cuales no puede sobrevivir ni un año.[xx] Especialmente la “Guerra de las Galaxias” de Reagan hacía imposible el ataque nuclear soviético, programado desde los años cincuenta.
Sólo la imbecilización sistemática de los pueblos y la total censura de prensa que agobia al Occidente impide ver que una “ex” URSS dirigida por un Coronel de la KGB (Putin), un sistema genocida en que ningún jerarca, ningún torturador, ningún genocida fue llevado a juicio, tal vez no haya muerto.  Es más confortable alegrarse con la caída del Muro y las noticias sobre el inminente remate de la momia de Lenin en el remate londinense Sotheby, que pensar que el arsenal nuclear soviético está intacto y en manos de sus antiguos usuarios (hoy ejemplarmente democráticos).

LECTURAS RECOMENDADAS
1.             Genta, Jordán B. Manual de Guerra Revolucionaria.
2.             Daujat, Jean. Conozcamos el comunismo.  Ed. Nuevo Orden, Bs. Aires.
3.             Meinvielle, Julio. El Poder Destructivo de la Dialéctica Comunista y El Comunismo en la Revolución Anticristiana. Ed. Theoría, Bs. Aires.
4.             Allen, Gary. None Dare Call It Conspiracy. Bucaneer Press, EE.UU.
5.             Anthony Sutton Western Technology and Soviet Economic Development, Universidad de Stanford, 1968. El autor prueba que toda la base tecnológica y fabril de la industria militar soviética fue construida con ayuda económica o técnica de los Estados Unidos. Balas made in U.S.A. liquidaban soldados norteamericanos en Vietnam.




[i] El tema aparece en detalle en Harvest of Sorrow, por Robert Conquest. Ver también “El Costo Humano del Comunismo Soviético”, por el mismo autor.
[ii] Dolores y Consuelo Aguiar-Mella y Díaz.
[iii] Sobre el conflicto español: Histoire Sécrete de la Revolution Espagnole, L. de Poncins, 1936.
[iv] Walther Carbone Iglesias, “Profesión de Fe Nacionalista”, 2a. edición, Mvdeo., 1990.
[v] Los anticomunistas poco informados objetan la política privatizadora de la Intendencia de Montevideo como una “contradicción”, sin advertir que contradecirse es lo propio de la ideología marxista.
[vi] Al recibir el “Premio Lenin” y la ciudadanía soviética, el jefe del partido comunista italiano, Palmiro Togliatti, declaró: “como italiano me sentía como un miserable mandolinista”.
[vii] Así la define la Gran Enciclopedia Soviética.
[viii] Ver Boche and Bolshevik, por Nesta Webster, OMNI Publications, California, EE.UU.

[x] Los interesados en profundizar el tema encontrarán provechoso el estudio de Nesta Webster Secret Societies and Subversive Movements, Boswell Publishing Co., Ltd.,Londres, 1924.  El inmanentismo propio de este aspecto de la ideología marxista lo entronca con una larga cadena esotérica y ocultista, cuya exposición iría más allá de los límites de esta nota.
[xi] Observaba el científico compatriota Julio Vilar del Valle que en la enseñanza oficial casi no se menciona el principio de entropía, según el cual la energía del universo se va consumiendo, como la cuerda de un reloj, sin reponerse, lo que desmiente el mito del progreso necesario y confirma la proposición religiosa de que el mundo tuvo origen y tendrá fin.

[xiii] W. Chambers, “El Testigo”.

[xv] Todos esos protagonistas, en cuanto aportan un beneficio a la comunidad, merecen, sin vacilación, el nombre de trabajadores, que el uso común suele reservar exclusivamente al operario manual. Cf. Walther Carbone Iglesias, op. cit.
[xvi] Citado por Jean Ousset, “Marxismo-Leninismo”.
[xvii] El lector interesado en realizar “ejercicios prácticos” debería escuchar con espíritu crítico cualquier radioemisoras de izquierda de Montevideo. Los locutores no logran ocultar su regocijo frente a las penurias que le impone el liberalismo al pueblo uruguayo.
[xviii] “Años Decisivos”.
[xix] Citado por Jordán B. Genta, “Manual de Guerra Contrarrevolucionaria”.
[xx] Véase la obra de Sutton en las referencias bibliográficas de esta nota.