martes, 11 de diciembre de 2012

Ante un nuevo año, saludo reflexión a mis compatriotas



En nombre del Bloque Cívico UNIDAD NACIONALISTA, expresión blanca, pero también Suprapartidaria, de los valores esenciales y permanentes de los orientales, invito a mis compatriotas a un balance sobre la lucha que hemos librado en este año y los desafíos que nos impone el venidero.

Nuestro movimiento es la única fuerza cívica que no se ha detenido en la superficie de los acontecimientos, sino que ha ido a las causas últimas de la dramática situación que vive nuestro pueblo, y se ha jugado por éste.

n  SÓLO NOSOTROS hemos exigido Honor al Trabajo y Respeto al Trabajador, que es la antítesis de la  política oficial de fomento del parasitismo con dinero de los trabajadores de hoy y de ayer. 
Luchamos por una República de Trabajadores, es decir por la supremacía moral y política de todos los que con afán solidario, sin importar su clase social, hacen algo positivo por la comunidad: obreros, campesinos, intelectuales, educadores poseídos de la grandeza de su misión, compatriotas de las Fuerzas Armadas y Policiales que custodian la soberanía nacional externa e interna, religiosos que velan por las necesidades espirituales de la gente y alivian tantos quebrantos materiales de los pobres, estudiantes que resisten el lavado de cerebro oficial, padres y madres que defienden a sus hijos contra la degradación oficializada de la enseñanza.

n  SÓLO NOSOTROS hemos ilustrado al pueblo para que identifique y rechace el engaño de una pseudo-oposición y cierto periodismo que protege al régimen llamándolo  “ineficiente” o “incapaz”, para tapar  el hecho de que en realidad esa camarilla está ejecutando eficientemente un dosificado proceso de prostitución del derecho, miserabilización económica del pueblo, degradación de la cultura, masificación de la enseñanza, y fiscalismo confiscatorio, para alcanzar el objetivo que ellos mismos han llamado “el puñetazo al paralítico”: la toma del poder sin esfuerzo en una nación postrada y espiritualmente inerme.  Cuando llaman “corrupto” al régimen, esos malos políticos y periodistas también encubren al régimen bajo apariencia de criticarlo, porque silencian su lacra principal, que es ser cipayo de la usura plutocrática que nos está robando la Patria, antes y primero que vaciarnos el bolsillo con ilícitos administrativos que también cometen. Percibimos y aplicamos la verdad universal que proclamó Primo de Rivera:  ”Un gobierno marxista equivale a una invasión extranjera”.

n  SÓLO UNIDAD NACIONALISTA ha defendido al pueblo contra la acusación de los liberales de que “ha perdido valores”, porque es precisamente el liberalismo el que inculca al pueblo que no existen valores permanentes, que toda verdad es negociable y que el derecho no tiene fundamento en principios intocables, y lo han convertido en un mecanismo de prepotencia legalizada de mayorías aleatorias de individuos carentes de móviles confesables. Esta acusación nuestra se muestra con claridad meridiana en la entrega de la soberanía jurídica del Uruguay al desconocer dos pronunciamientos populares coincidentes para complacer, genuflexos, a poderes internacionales sin jurisdicción en nuestros asuntos y más tarde allanarse a la pretensión del Grupo Gelman, lo que no dejó a los juzgadores otra opción que condenar al Uruguay por obra del propio (des)gobierno del país que pedía a gritos que triunfara la parte contraria.  Pero el prontuario legislativo del marxiliberalismo no acaba allí, sino que envalentonado por sus inconstitucionalidades ha osado atentar contra la vida inocente de los niños y haciendo un tatetí con los tratados internacionales, violó la Convención Interamericana de Derechos Humanos (ésta no es “políticamente correcta”) y además injuria a  la noble profesión médica --de este Uruguay que ha dado un Morquio salvador de millares de niños, y cuya historia registra arquetipos como Gustavo Volpe, estudiante de Medicina que no dudó en ofrendar su vida por principios que hoy se ridiculizan impunemente desde el poder infanticida, cuyo modelo de conducta parece ser el del ejecutor de Pascacio Báez Mena. Hemos señalado que el régimen exhibe con particular claridad su patibulario programa al intentar instrumentar a los médicos para su plan genocida olvidando la enseñanza de Hufeland de que “un médico sin moral sería más que una anomalía: sería un monstruo” (Makrobiotik, Berlín, 1842) . 

n  SÓLO NUESTRO MOVIMIENTO realiza con hechos el principio fundacional oribista de Independencia, Nacionalidad y Americanismo y por lo tanto combate la dilución de nuestra identidad política en una globalización sin fronteras espaciales ni morales. Como blancos que cada vez escasean más en las cúpulas de nuestro partido, nos sentimos Defensores de las Leyes y recordando que hay mil tumbas de blancos que en guerra civil se jugaron por la legalidad, repudiamos violaciones constitucionales como la travestizacion del Mercosur, ente económico, en un arma política de persecución de los gobiernos que no quieran someterse a las imposiciones del gobierno mundial. En esta esfera, con el jurídicamente  inválido “Protocolo de Ushuaia” el liberalmarxismo expone a nuestro país a una agresión exterior, porque legitima irresponsablemente el “derecho” de países más poderosos a decretar que el gobierno uruguayo que se les antoje no es democrático según el paladar de, por ejemplo, las guerrilleras jubiladas Dilma y Cristina, e imponerle “sanciones”, aislarlo, ¿invadirlo? cuando y cómo quieran.

n  Nos hacemos justicia, asimismo, por no habernos detenido en la indispensable crítica, sino  elaborado medidas, planes y programas de Restauración Nacional  realistas que podrán aplicarse sin dilación. Y que lejos de ser enunciados teóricos, han sido acompañados en todos los casos por planteos viables e inmediatamente ejecutables formulados generosamente y sin afán electoral a autoridades públicas y entidades sindicales (SUNTMA y el propio PIT-CNT), en una clara demostración nuestra de que nuestro norte es la paz pública, y no el revanchismo torvo que exhiben los enemigos del país.  Actitud probada además por ser quien esto suscribe el autor del primer proyecto de pacificación nacional con mediación de altas autoridades religiosas, y en este año haber accedido a relatar sin reservas al pueblo sus vivencias de soldado, en el mayor bestseller reciente del Uruguay.

n  Se destaca en este año nuestra defensa de los trabajadores contra sectores sindicales que conducen las reivindicaciones de salario justo y pleno empleo de sus afiliados por la vía muerta de “paros generales” simbólicos e inconducentes y se han convertido en la correa de transmisión del régimen.  Simultáneamente hemos denunciado el egoísmo de grandes empresarios urbanos y rurales que financian al Frente Amplio tratando de retrasar  la hora de la “dictadura del proletariado” que ellos se merecen, pero que el pueblo no se merece.  Hemos exigido --sólo nosotros-- una huelga general por tiempo indeterminado hasta que cada uno de los trabajadores de Pluna tenga empleo, financiado ese gasto, como manda la Constitución, con la reparación que paguen quienes maquinaron el “suicidio” de la empresa.  Y por supuesto no nos hemos acobardado ante el terrorismo publicitario que exige “memoria y justicia” entendida como memoria de una historia falsa y seudojusticia consistente en un Katyn vernáculo que escarmiente a las nuevas generaciones sobre lo que “les va a pasar” si en cumplimiento de la ley y fieles a su juramento de soldados artiguistas deben defender al país y al pueblo ante una agresión armada extranjera, convencional o instrumentada por mercenarios.  Y no pararemos hasta acabar con la usura, fuente y raíz del genocidio económico y de la pseudo-reacción marxista que remacha las cadenas del sometimiento del pueblo oriental.

n  Por último --y esto abre las puertas a nuestro programa para el año que nace-- urgimos a nuestros compatriotas a “no esperar nada sino de nosotros mismos”, es decir a un sano escepticismo ante la capacidad de reacción de las oligarquías electorales. No se trata de aguardar pasivamente a que se abran los comités y candidatos autoelegidos movilicen dineros cuyo origen tímidamente no revelan.  De lo que se trata es de que cada nacionalista actúe, ya, se movilice, convoque, se agrupe con otras personas responsables, y promueva el urgente relevo en la dirección de nuestro partido, para que éste sea nuevamente un movimiento popular, como el de Herrera, Roxlo, Quintana, Carnelli, Fernández Crespo, Barrios Amorim y no patrimonio de personas que no pueden exhibir otro “mérito” que el ser descendientes de otros dirigentes cuyos méritos, si los tuvieron, sus hijos y nietos no han honrado en toda su burocrática existencia.  Podemos reclamarlo del pueblo blanco, porque nuestra lucha tesonera la hemos realizado, no desde la comodidad de las poltronas legislativas, sino desde abajo, sin esperar reconocimiento; por ejemplo como promotores de la creación de la Secretaría de Asuntos Sociales del Partido Nacional.

A ese pueblo nuestro que anda y arde en la calle, UNIDAD NACIONALISTA le abre las puertas en la certeza de que este programa nuestro --sencillo, lógico y REALIZABLE-- despertará amplias resonancias de ecos y simpatías. Cada hombre y mujer es responsable y protagonista. Es incuestionable que esta próxima elección dará al país la última posibilidad antes de que el régimen se consolide definitivamente y aplique en nuestro suelo la receta liberticida que ha sembrado infortunio, miseria  y esclavitud en el mundo entero.

Al programa total de los enemigos del país debemos oponer una respuesta también total.  Cuando se defiende el nivel de vida de los trabajadores y jubilados, cuando se reclama seguridad pública, cuando se pretende una justicia auténtica y no contaminada por la política, cuando se reivindica el derecho a la vida de los compatriotas aún no nacidos y no su exterminio, cuando se exige una administración honesta y no corrupta, cuando se combate la minería a cielo abierto y demás formas de desertificación del país, cuando se reclama una educación para seres libres y responsables y no siervos cosmopolitas adoctrinados en el escepticismo y en los goces de una sociedad de consumo que ni siquiera se les da, cuando se exigen las máximas penas para los corruptores de la moral pública, cuando se reclama la baja de la carga impositiva, cuando al capitalismo salvaje progenitor del marxismo se opone una doctrina de subsidiariedad estatal que apoye y ayude la iniciativa privada sin asfixiarla ni tampoco permitir sus abusos, cuando se clama con justa indignación porque mueren pacientes por falta de ambulancias pagadas con suscripción pública, cuando se advierte que cárceles convertidas en campos de exterminio y tortura garantizan la irrecuperabilidad de los reclusos, todas esas reivindicaciones son una única y misma lucha y es torpe que quien esté preocupado por alguna de ellas que lo afecta directamente se desentienda por las restantes, en lugar de abrazar esas otras causas con idéntico afán. Dividirnos es la fórmula infalible de la minoría antinacional para derrotarnos.

El Bloque Cívico que tengo el honor de orientar y conducir es el vehículo de ese gran avance estratégico y metodológico.

Coronel Luis María Agosto
Secretario General
Orientador Ideológico
Tel. 27081072
Visite nuestro blog. Serán bienvenidas sus opiniones
Luisagostob.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario