lunes, 26 de marzo de 2012

La verdad al pueblo

La tragedia evitable  del asesinato en masa de pacientes en centros de exterminio revela total ausencia de controles –si es que no conocimiento y complicidad de los crímenes en altas jerarquías. Sea negligencia o dolo, las entidades involucradas y el Estado deben indemnizar inmediatamente a las familias de las víctimas. El Poder Ejecutivo no debe aguardar tranquilamente a que la justicia disponga las reparaciones, sino ejercer ya sus poderes de Policía Administrativa decretando la INTERVENCIÓN INMEDIATA de todos los antros institucionales en que se perpetraba la tortura y eliminación de personas inermes.

Los jueces, por su parte, podrían, por una vez, acordarse de la advertencia de Couture, de que en materia procesal “el tiempo es más que oro: es Justicia”, y reprimiendo chicanas y trapacerías leguleyas --como les manda hacer el Código del Proceso— impongan indemnizaciones, no simbólicas ni timoratas, sino literalmente RUINOSAS para las entidades e individuos culpables.  Si vacilan en hacerlo, tienen un claro parámetro en su propia jurisprudencia de generosísimas reparaciones para miles de personas que en pleno uso de sus facultades mentales empuñaron las armas contra el poder público llevados por credos ideológicos. Si esa munificencia en su opinión letrada se justificaba, con tanto más razón deben reparar por sumas mucho mayores a las familias de personas  que yacían, inermes y aisladas, muchas comatosas y ancianas, en los CTI de los antros de exterminio detectados.

Sólo con esa actitud de respeto de la legalidad formal y sustancial podremos concebir que el Estado de derecho del que el régimen se jacta en las tertulias internacionales es algo más que una ficción mendaz, y que no es cierto que tal como lo demostramos con textos legales en la mano en un ensayo que conmovió al país, el Uruguay no es un Estado Torturador, y que los derechos humanos no habitan sólo en el invernáculo de los códigos, sino que gobernantes y políticos velan por ellos en algo más que en discursos de circunstancias.

Cnel. (r) Luis Maria Agosto
Unidad Nacionalista
Partido Nacional

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